La rúa para celebrar el campeonato de Liga número 28 del FC Barcelona tendrá lugar este viernes por la tarde. Los seguidores azulgrana saldrán a la calle nuevamente para festejar un nuevo título tras conquistar la Copa del Rey hace menos de un mes ante el Real Madrid y tras la victoria en el clásico del pasado domingo.
La comitiva saldrá del estadio Spotify Camp Nou a las 18.00 horas y hará un recorrido por las calles Arístides Maillol, Travessera de les Corts, Numància, Berlín, París, Balmes, Pelai, Plaza Catalunya, Fontanella, Plaza Urquinaona, Trafalgar, Paseo de Sant Joan y terminará en el Arco del Triunfo alrededor de las 21.00 horas.
El Ayuntamiento de la ciudad recomienda utilizar el transporte público, ya que la celebración causará afectaciones en la movilidad. De hecho, desde primera hora de este viernes se ha prohibido el estacionamiento de vehículos en la calzada de la calle Fontanella.
El dispositivo preparado para la celebración contempla que la Guardia Urbana acompañe a la comitiva del FC Barcelona. Ellos serán los encargados de cortar el tráfico a medida que avance el itinerario y de adoptar las medidas adecuadas para mantener la seguridad y fluidez del tráfico.
En la última rúa, en 2023, más de 76.000 personas salieron a las calles de Barcelona a festejar. Ya este jueves, a 45 minutos del final del partido frente al Espanyol, la policía calculaba que estaban presentes para celebrar el título en la fuente de Canaletas unos 5.000 aficionados. Cuando terminó el partido, el Barcelona evitó celebrar el campeonato en el campo. “Hay que tener respeto”, subrayó Hansi Flick.
ℹ️ Afectacions de la mobilitat per la celebració de campions del FC Barcelona.
Rua des de les 18.00 fins a les 21.00 hores.
Recomanem l’ús del transport públic subterrani.Consulta’n el recorregut i les afectacions a https://t.co/HOVAnJIauy pic.twitter.com/ZzRKgLjkpE
— Ajuntament de Barcelona (@bcn_ajuntament) May 16, 2025
En cuanto el árbitro pitó el final, Lamine Yamal se dirigió directamente al vestuario. Otros azulgranas, en cambio, optaron por festejar en el césped de Cornellà, una actitud que provocó la reprimenda de los blanquiazules. Se encendieron los aspersores y ya con la policía en el campo para evitar una posible invasión —como la que ocurrió durante la celebración de la Liga en 2023—, los jugadores del Barça se retiraron.
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