Los Golden State Warriors continúan con vida en los playoffs de la NBA. El equipo de Steph Curry ha derrotado este domingo a los Houston Rockets (103-89) en el séptimo juego de una serie física y muy sufrida. Los de San Francisco avanzan a las semifinales de la conferencia Oeste, donde ya los esperan Anthony Edwards y los Minnesota Timberwolves. Los Rockets acariciaron la posibilidad de convertirse en el decimoquinto equipo en la historia de la NBA que remontaba un 3-1, pero los Warriors impusieron su larga experiencia en postemporadas con una victoria a domicilio.
Curry, con 37 años, no ha jugado al cien esta serie. La estrella ha tenido problemas con el pulgar derecho desde que se lo lesionó en enero. Esta semana se le vio aplicarse hielo en el dedo y recibir nuevo tratamiento. Los jugadores de los Rockets sabían de este punto débil e intentaron explotarlo. Este domingo se apreciaba que el base estaba utilizando un soporte en la base del pulgar.
La estrella de los Warriors apenas compareció durante la primera mitad. Su primera canasta de la noche, un triple, fue registrada segundos antes del descanso. Su letargo no provocó la alarma en el equipo de Steve Kerr gracias a los actores de reparto de Golden State, quienes fueron claves para la calificación.
El escolta Buddy Hield ha registrado esta noche el mejor juego de unos playoffs de su carrera. El jugador bahameño ha desfilado por cinco equipos en nueve años en la liga. Esta noche, en apenas su onceavo juego de postemporada, ha tenido una noche para el recuerdo con nueve de once triples encestados y 33 puntos. Ha sido el máximo anotador para Golden State y quien impulsó al equipo en la primera parte junto a Jimmy Butler (20 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias) y Draymond Green (16 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias). El trío hizo que los Warriors se fueran al descanso con una cómoda ventaja de 12 puntos.
Houston jugaba en su estadio ante cerca de 20.000 personas. Eran los primeros playoffs en casa para el equipo desde 2019 (en 2020 también se clasificaron, pero fue el año de la burbuja), y llegaban como favoritos después de haber terminado la temporada en la segunda posición de la tabla y de haber remontado un 3-1 con dos triunfos al hilo.
En el tercer cuarto Houston supo aprovechar que los Warriors quitaron el pie del acelerador. Tuvieron una racha parcial de 14-4 apoyándose en Amen Thompson. El base de 22 años fue uno de los mejores de los Rockets en la serie y esta noche cerró su primera aparición en unos playoffs con 24 puntos y 9 rebotes. El turco Alperen Sengun tuvo 21 puntos y 14 rebotes y Fred VanVleet, quien ya fue campeón en 2019 con Toronto, sumó 17 puntos.
Curry anotó 36 puntos en el tercer juego de la serie. La defensa de Houston apretó la marca. Thompson fue encomendado con la difícil tarea de mantener a raya a la estrella de Golden State en los juegos cinco y seis. Dio resultado, pues sumó 30 puntos en dos noches y solo encestó un 29% de larga distancia. Esta noche, Curry reapareció en la segunda mitad con 19 puntos (cuatro de diez triples). Tuvo también diez rebotes defensivos, liderando a su equipo en esta área.
Aún quedan muchas interrogantes en el juego de Golden State. De momento, ha evitado la eliminación en lo que hubiera sido un desolador desenlace. La última aparición en postemporada fue una dolorosa derrota en semifinales contra los Lakers hace dos años. El equipo de LeBron James y Luka Dončić ya ha sido eliminado por los Timberwolves. Los Warriors siguen con vida en un año que ha sido cuesta arriba en el que encontraron oxígeno en la recta final de la temporada gracias al fichaje de Jimmy Butler. El martes comenzarán una de las pruebas más duras de la campaña.
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