La Audiencia de Girona ha condenado a 30 años de cárcel a Jens Schumacher, el berlinés que mató de un disparo a una mujer de 59 años para robarle la autocaravana.
El crimen tuvo lugar el 23 de septiembre del 2022, hacia las dos de la tarde. Ese día, Schumacher pasó en bicicleta cerca de una casa en Empuriabrava, segunda residencia de una pareja también alemana, y al ver una autocaravana aparcada fuera, decidió entrar para robar las llaves y llevársela. Accedió a la casa por una puerta trasera que estaba abierta, mientras llevaba consigo una pistola que había cogido de casa de su hermano en Alemania, sin que este lo supiera. Pese a que la víctima estaba dormida, Schumacher subió al dormitorio y le disparó a quemarropa en la cabeza para asegurarse la huída. Tras robar la caravana, condujo hasta Portbou donde la policía lo interceptó y lo detuvo.
La sentencia de la Sección Tercera, cuya ponente ha sido la magistrada Sonia Losada, condena al acusado a un total de 30 aos de prisión, en base al veredicto unánime del jurado popular. En concreto, se le imponen 22 años y medio por un delito de asesinato, 5 años por robo en vivienda habitada con uso de arma de fuego y 2 años y medio por tenencia ilícita de armas. El fallo judicial califica el asalto mortal como un acto “brutal, despiadado y frío”. La pena impuesta se acerca a la solicitada por el fiscal Enrique Barata, quien haba pedido 30 años y medio de cárcel para el acusado, de origen berlinés.
Así, la sentencia recoge que “la muerte resultaba de todo punto innecesaria para la consecución del acto de apoderamiento de la autocaravana, para lo que hubiera sido suficiente el acceso a la vivienda, la localización de las llaves y la huida de la vivienda con éstas, previa comprobación que la víctima se hallaba dormida”. La sala insiste con que “le hubiera bastado dejarla inconsciente, aturdida o incluso maniatada para poder alcanzar el objetivo. Por el contrario, ejecutó el acto más vil y abyecto de todos los violentos posibles, cual fue causarle intencionadamente la muerte, acción del todo desproporcionada, gratuita e innecesaria”. Durante el juicio el acusado, que fue sargento del ejército alemán e instructor durante una década, reconoció su culpabilidad pero se negó a responder las preguntas de todas las partes, incluso las de su propia abogada.
Además de la pena de prisión, Schumacher ha sido condenado a 10 años de libertad vigilada. Durante ese periodo, también tiene prohibido comunicarse o acercarse a menos de 500 metros de los familiares de la víctima. Asimismo, deber indemnizar al marido con 90.000 euros y con 75.000 euros a cada uno de los hijos de la víctima en concepto de responsabilidad civil.
Comentarios